La iluminación es importante en cualquier época del año, pero se vuelve clave durante el otoño y el invierno. La reducción de las horas de luz natural, así como el cambio de hora hacen que la luz artificial tenga una especial relevancia en los meses más fríos. Ahí entra en juego la iluminación regulable, una tipología que se ha extendido en la mayoría de hogares.

La iluminación regulable te proporciona la luz adecuada y necesaria en función de la actividad que vayas a realizar. Es perfecta para el hogar, pero también se encuentra muy demandada en negocios como tiendas, cafeterías, museos o restaurantes, entre otros. Por eso, desde Vieco Iluminación queremos darte a conocer todas las características de este tipo de luces/lámparas tan importantes.

Por qué elegir la iluminación regulable

- Ahorro: es obvio pensar que, al tener la capacidad de regular la luz, el ahorro puede ser considerable en la factura a final de mes. La razón es que reducirás la energía gastada, lo que se traduce en un menor coste de energía.

- Personalización: regular la intensidad de la luz hace que tengas la posibilidad de crear ambientes únicos, según tus necesidades. Desde un espacio más cálido y acogedor si eliges una luz suave, a un espacio donde trabajar o estudiar con una luz más intensa.

- Versatilidad: buscamos un ambiente en cada lugar concreto de la casa y la iluminación regulable puede dártela. Es muy versátil y vale para casi cualquier estancia del hogar, aunque es más común verlo en salones, comedores y dormitorios.

- Punto focal: una de las características que presenta la luz y lámparas regulables es que puedes emplearse como punto focal. De esta manera, conseguirás resaltar un rincón de cualquier estancia como por ejemplo un cuadro o una fotografía.

- LED: como en el resto de la iluminación de tu casa, apuesta siempre por lámparas y bombillas regulables LED. Consumen menos que los reguladores normales, lo que significa una revolución para tu hogar eligiendo además el color y tonos de las mismas.